Seguramente alguna vez te hayas preguntado por todas las formas en las que puedes conseguir que tu empresa mejore, haya mejor ambiente laboral, el equipo trabaje mejor y más agusto o cómo conseguir motivar a tus empleados.
Los Escape Rooms hace un tiempo que llegaron al top de las actividades favoritas de muchos de la capital, es una alternativa al ocio nocturno, a las cenas o excursiones para cualquier persona y edad ya que tienen diferentes niveles y dificultades, y muy económica.
Pero además en los últimos años muchas empresas la han elegido como una actividad de ocio para sus empleados, una forma de celebrar cenas de Navidad, reuniones o como parte del Team Building.
Al estar en pleno centro es muy sencillo llegar al lugar, lo que nos permite ahorrarnos mucho tiempo en desplazamiento y posteriormente terminar la jornada comiendo o cenando en algún sitio cercano.
Los diferentes horarios en los que tendremos la experiencia hacen que podamos adaptarlos incluso a reuniones anteriores o hacer la actividad tras nuestra jornada laboral. Solamente tendremos que buscar cual nos convenga más y reservar.
Está hecho para cualquier tipo de empresa, da igual cuántos empleados o clientes tengan. Aunque las salas normalmente están diseñadas para un número concreto de participantes si en vuestra empresa sois más os podréis dividir en varias y hacer competiciones entre los grupos para ver quién resuelve antes el escape.
Su lado social es el que convierte esta actividad en una herramienta muy útil para nuestros negocios. No solamente se trata de resolver un acertijo en el tiempo indicado sino que los empleados tendrán que usar su empatía, su coordinación, resolver la tensión que provoca la falta de tiempo y mantener la cabeza fría.
Básicamente todo lo que se necesita tener a diario para que una empresa y un proyecto funcionen. No saldrán del escape si no colaboran entre ellos, compartiendo información, haciendo varias tareas a la vez o motivándose mutuamente.
Cada empleado tendrá una habilidad especial que tendrá que sacar y juntas todas ellas serán las que hagan que se resuelva el acertijo. Tendrán que trabajar como las abejas de una colmena, no se trata de un juego de competición sino de colaboración.
Aquí de nada vale quedarse paralizado por los nervios, tendrán que saber manejar la falta de tiempo y de recursos para llegar “vivos” al final y conseguir la meta. Aprendizaje muy útil a la hora de implantarlo en la oficina.
Ya que en muchas ocasiones la presión y la falta de tiempo hacen que nos bloqueemos y que no seamos capaces de ver las diferentes opciones que tenemos delante, o de dejar esa tarea y buscar otra salida.
Trabajar en grupo hará que compartan una experiencia gratificante, que compartan algo más que una oficina y horas laborales. Se aprende a comunicarse efectivamente, a animarse y sobre todo se conoce de otra forma a los compañeros.
En muchos escape rooms han salido personas sorprendidas de la gestión del tiempo de sus compañeros, o de la habilidad de resolver acertijos, el temple… Es en las situaciones límites en las que las personas sacan lo mejor de sí mismas.
Individualmente la autoestima crecerá, ya que habrán sido capaces de enfrentarse a un desafío, habrán descubierto cosas de sus compañeros que les agraden, se habrán visto reforzados por estos e incluso habrán aprendido algo nuevo.
Además de sentirse valorados por la empresa, un negocio que se preocupa por el bienestar de sus trabajadores es un negocio respetado tanto desde fuera como desde dentro. Los empleados no querrán buscar otro trabajo y surgirán nuevos interesados en el puesto viendo el buen ambiente que se respira.
Pero sobre todo los escape son una óptima alternativa para huir de la monotonía y del hastío que a veces inunda las oficinas. Está demostrado que después de una experiencia similar el ambiente laboral mejora notablemente. La oficina recobra su alegría, las conversaciones fluyen, los empleados trabajan con más soltura y más relajados. En definitiva es un muy buen multivitamínico para nuestro negocio.