



Pero, ¿por qué el escape room es idóneo como una actividad para empresas?
Su lado social es el que convierte esta actividad en una herramienta muy útil para nuestros negocios. No solamente se trata de resolver un acertijo en el tiempo indicado sino que los empleados tendrán que usar su empatía, su coordinación, resolver la tensión que provoca la falta de tiempo y mantener la cabeza fría.
Básicamente todo lo que se necesita tener a diario para que una empresa y un proyecto funcionen. No saldrán del escape si no colaboran entre ellos, compartiendo información, haciendo varias tareas a la vez o motivándose mutuamente.
Cada empleado tendrá una habilidad especial que tendrá que sacar y juntas todas ellas serán las que hagan que se resuelva el acertijo. Tendrán que trabajar como las abejas de una colmena, no se trata de un juego de competición sino de colaboración.
Aquí de nada vale quedarse paralizado por los nervios, tendrán que saber manejar la falta de tiempo y de recursos para llegar “vivos” al final y conseguir la meta. Aprendizaje muy útil a la hora de implantarlo en la oficina.
Ya que en muchas ocasiones la presión y la falta de tiempo hacen que nos bloqueemos y que no seamos capaces de ver las diferentes opciones que tenemos delante, o de dejar esa tarea y buscar otra salida.
Trabajar en grupo hará que compartan una experiencia gratificante, que compartan algo más que una oficina y horas laborales. Se aprende a comunicarse efectivamente, a animarse y sobre todo se conoce de otra forma a los compañeros.
En muchos escape rooms han salido personas sorprendidas de la gestión del tiempo de sus compañeros, o de la habilidad de resolver acertijos, el temple… Es en las situaciones límites en las que las personas sacan lo mejor de sí mismas.
Individualmente la autoestima crecerá, ya que habrán sido capaces de enfrentarse a un desafío, habrán descubierto cosas de sus compañeros que les agraden, se habrán visto reforzados por estos e incluso habrán aprendido algo nuevo.
Además de sentirse valorados por la empresa, un negocio que se preocupa por el bienestar de sus trabajadores es un negocio respetado tanto desde fuera como desde dentro. Los empleados no querrán buscar otro trabajo y surgirán nuevos interesados en el puesto viendo el buen ambiente que se respira.
Pero sobre todo los escape son una óptima alternativa para huir de la monotonía y del hastío que a veces inunda las oficinas. Está demostrado que después de una experiencia similar el ambiente laboral mejora notablemente. La oficina recobra su alegría, las conversaciones fluyen, los empleados trabajan con más soltura y más relajados. En definitiva es un muy buen multivitamínico para nuestro negocio.


